¿Qué es un esguince?

El esguince es considerado una distensión ligamentosa (torcedura), de la cual deriva una lesión en los ligamentos. Usualmente se provoca por una torsión, rasgadura o estiramiento excesivo. La manifestación de un esguince se acompaña, generalmente, por hematomas (moretones), dolor e inflamación. Los pacientes con un esguince presentan dolor en la zona afectada, así como una limitación en sus movimientos.

Causas de un esguince

Las causas de un esguince varían en función del lugar afectado. Por lo que primero es necesario delimitar en qué lugares es más fácil sufrir un esguince. Estas zonas son:

  • Dedos de las manos.
  • Muñeca.
  • Rodilla.
  • Tobillo.

Las principales causas de esguince en los dedos de las manos es la sobrecarga de fuerza o presión al practicar deportes. Es usual sufrir un esguince cuando en deportes como basquetbol o voleibol se recibe incorrectamente el balón.

Por su parte, el esguince de muñeca es común cuando la persona cae sobre su mano extendida.  Del mismo modo, la rodilla sufre un esguince cuando gira de manera incorrecta en alguna actividad física o deportiva.

Finalmente, los esguinces en el tobillo son causados por caminar o realizar ejercicios en superficies desniveladas en las que es difícil estabilizar el cuerpo.

Síntomas de un esguince

Es muy importante conocer las manifestaciones clínicas de un esguince, ya que a veces se pueden confundir los síntomas con alguna luxación, lo cual es un padecimiento más grave. Los principales síntomas de un esguince son:

  • Calor en la zona afectada.
  • Dolor articular o muscular.
  • Hematomas.
  • Inflamación en la zona afectada.
  • Rigidez articular.

Tratamiento para un esguince

El tratamiento para pacientes con algún esguince suele ser domiciliario, es decir, no se requiere ningún procedimiento clínico más complejo fuera de casa. No obstante, se recomienda acudir con un médico a fin de que se pueda indicar algún tratamiento con analgésicos o antiinflamatorios para favorecer una rápida recuperación. Las recomendaciones generales para tratar un esguince son:

  • Aplicar compresas de hielo inmediatamente después del accidente. La aplicación oportuna de frío ayudará a reducir la inflamación del esguince.
  • Descansar durante varios días sin hacer esfuerzo.
  • Elevar la extremidad afectada durante algunos días.
  • Realizar ejercicios para evitar la rigidez y aumentar gradualmente la fuerza.
  • Usar medicamentos antiinflamatorios.
  • Vendar firmemente la zona afectada, de tal modo que el vendaje no se encuentre apretado.

Tipos de esguince

Los esguinces se clasifican en tres grados en función de la gravedad de la lesión. Los esguinces de primer grado, también conocidos como entorsis, son aquellos en los que existe una distensión parcial del ligamento, aunque dentro de las lesiones no exista una rotura o arrancamiento.

Por su parte, los esguinces de segundo grado se caracterizan por presentar una rotura total o parcial de los ligamentos.

Finalmente, los esguinces de tercer grado son aquellos en los que, además de una rotura total del ligamento, también existe un arrancamiento óseo, el cual únicamente puede ser atendido mediante una intervención quirúrgica.

¿Cómo prevenir un esguince?

Las recomendaciones generales para prevenir esguinces son:

  • Antes de realizar cualquier actividad física o deportiva es importante hacer estiramientos.
  • Evitar, en la medida de lo posible, utilizar tacones demasiados altos.
  • Mantener sano el sistema muscular y esquelético mediante una dieta equilibrada.
  • Utilizar calzado que proteja el tobillo y otras articulaciones (como las botas, por ejemplo)

Originaria de Venezuela, Sascha Barboza es una de las autoridades en materia de fitness como estilo de vida. Es entrenadora personal certificada por la ISSA (International Sports Sciences Association), mamá, autora de libros y tiene su propia línea de suplementos alimenticios.