
Es un entrenamiento que todos debemos probar aunque sea por una semana.
Todo empezó cuando empecé a sentirme mal; en las mañanas la flojera me vencía, prefería quedarme cómoda en la cama a salir y correr con el amanecer. De vez en cuando hacia spinning y una que otra clase de yoga por la tarde, pero no era suficiente, de todas formas me sentía pesada.
Sabía que tenía que recuperarme y dejar la flojera atrás. Así que me comprometí a correr 5k todas las mañanas. El ritmo no importaba, lo importante era correr. Y mi proceso empezó así:
1. LA PREPARACIÓN LO ES TODO
Despertar en la madrugada es mucho más fácil cuando tienes una meta en mente. La noche previa a correr, puedes dejar tu ropa preparada y así te será mucho más fácil arreglarte y salir a correr. ¡No permitas que la flojera tome control de tu cuerpo!.
2. MIENTRAS MÁS TEMPRANO, MEJOR
Está comprobado que aunque cuesta más trabajo despertar, es mucho más factible que si salgas a correr. Ya que aunque te tardes más tiempo arreglándote, de igual manera vas a estar listo temprano y no tendrás ninguna excusa para no correr como “Se me va a hacer tarde para el trabajo/escuela/mi vida diaria”.
3. CORRER CON ALGUIEN DE VEZ EN CUANDO
Correr con alguien puede ser bueno cuando te aburres rápido, pero es mucho mejor cuando corres con alguien que te saca de tu zona de confort. Ya que aunque sabes que puedes cumplir el reto que tu compañero te esta poniendo, te obligas a completarlo y saca ese lado competitivo que tienes, todo esto puede ser que disfrutes aún más tu ruta. Si te esta costando mucho correr, intenta correr acompañado.
Pero…. Y a todo esto, ¿Qué es lo que pasa?
4. SE CONVIERTE EN UN HÁBITO
Una vez que logras superar los problemas anteriores, correr se vuelve un hábito y cada vez podrás aumentarle más y más kilómetros hasta que tu cuerpo lo necesite y tenga una resistencia maravillosa.
Sin importar lo rápido o lento que seas, tu cuerpo está cambiando, cada vez es más saludable y eso no solo se va a reflejar en tu sistema, si no que también lo verás en tu físico, comenzarás a perder peso y a ganar velocidad. Mentalmente es un excelente reto, ya que te programaras a que si se puede y a que todo lo que te propongas lo podrás conseguir.
Se creará un hábito, cada vez será más fácil despertarte y cada vez será mucho más fácil correr. Anímicamente estarás feliz y estable, ya que en las mañanas liberarás mucho estrés.
¡anímate a probarlo! Y cuéntanos cómo te fue
Leticia Román nació en Nueva York pero vive en México desde hace más de 10 años. Estudió danza en prestigiosas escuelas como: Laguardia High School of the Performing Arts. Se encarga de promover una alimentación sana y un entrenamiento inteligente que les permita gozar de bienestar físico y una vida feliz.