Dieta hiposódica: ¿Qué es y para qué sirve?

La dieta hiposódica controla el consumo de sodio para mantener el estado de hidratación e impedir la retención de líquidos, ya que el sodio no solo está presente en la sal, sino también en todos los alimentos altamente procesados, ya sean dulces o salados.

Esta dieta se clasifica en leve, moderada, estricta o intensa, porque está recomendada en pacientes con hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca, hepática, renal y tratamiento con yodo.

Sin embargo, es importante aclarar que una dieta hiposódica jamás podrá ser hipercalórica, ya que el sodio está presente en casi todos los alimentos que se consumen a diario.

¿Para quién está indicada la dieta hiposódica?

Seguir una dieta hiposódica es recomendable en personas con los siguientes padecimientos:

  • Si se padece insuficiencia renal
  • En casos de insuficiencia hepática
  • Hipertensión arterial y problemas del corazón
  • Para reducir la retención de líquidos y estimular la circulación sanguínea

La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que un consumo de sal adecuado es menor a los 5 gramos por día, ayudando a disminuir la tensión arterial y minimizar el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares e infartos de miocardio.

¿Qué comer en una dieta hiposódica?

Estos son alimentos naturalmente bajos en sodio y que puedes cocinar tantas veces como quieras:

  • Queso bajo en sodio
  • Pasta y fideos cocidos sin sal
  • Pescado sin sal, frijoles y nueces
  • Verduras frescas y congeladas sin salsas
  • Pan, cereal, arroz, pasta, trigo y arroz inflado
  • Postres y bebidas: miel, mermelada, helado, café o té

Entre más cocines en casa, tendrás mejor control sobre lo que consumes, ya que no solo sabrás la calidad de los ingredientes, sino que podrás eliminar o cambiar ciertas alimentos de la receta.

Menú de la dieta hiposódica

Aquí un ejemplo del menú de la dieta hiposódica en cada tiempo de comida:

Desayuno:

  • Pan tostado
  • Té de manzanilla
  • Claras de huevo revueltas sin sal
  • Plato de pera con manzana fresca

Almuerzo: Pieza de fruta o yogurth natural.

Comida:

  • Agua de sabor
  • Manzana cocida
  • Tortillas de maíz
  • Sopa de fideo sin sal
  • Chayotes al vapor sin sal
  • Pescado a la plancha sin sal

Merienda: Pieza de fruta o yogurth natural.

Cena:

  • Té de hierbabuena
  • Puré de fruta fresca
  • Quesadillas de queso panela y salsa verde sin sal

La cantidad estará determinada por las kilocalorías que deba consumir cada paciente. Si consumes demasiado sodio, retendrás más agua, lo que hará que tu cuerpo mueva demasiada agua, y aumentará tu presión arterial y el riesgo de una enfermedad cardíaca.

Alimentos restringidos en la dieta hiposódica

Estos son algunos alimentos restringidos en la dieta hiposódica:

  • Embutidos y yemas de huevo
  • Salsas enlatadas o en conserva
  • Alimentos enlatados, como atún
  • Polvos y jarabes para preparar agua
  • Jugos enlatados, refrescos y agua mineral
  • Sal de mesa, consomé concentrado y lácteos
  • Galletas, repostería, hot cakes y panes salados
  • Bebidas deportivas y algunas bebidas alcohólicas
  • Aderezos como mayonesa, mostaza, catsup, mil islas o ranch

Los alimentos no procesados y más ricos en sodio son los de origen animal: mariscos, carnes, pescados, huevos y lácteos.

Esto no significa que debas sacar al sodio de tu vida, recuerda que es un mineral vital para el funcionamiento normal de tus riñones, ayuda a tu cuerpo a retener agua y esencial para que tus músculos y nervios funcionen apropiadamente.

Contraindicaciones de la dieta hiposódica

La dieta hiposódica está contraindicada en personas con:

  • Ileostomías
  • Terapia con litio
  • Nefropatías o situaciones con pérdida de sodio
  • Embarazo, solo si existía previamente una patología que precisara dieta hiposódica

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¿Cómo reducir el consumo de sodio?

1. Mantén un registro de lo que comes para poder hacer cambios hacia una dieta más saludable, empieza por saber la cantidad de sal que consumes y no pongas saleros en la mesa.

2. Busca alternativas saludables, por ejemplo, si se te antoja una botana, pon palomitas en la freidora de aire y no les añadas sal.

3. Cuando tengas ganas de comer algo rápido, evita la comida empaquetada o enlatada. Siempre ten algo saludable a la mano, como frutas y verduras.

4. Aprende cómo se cocina la comida saludable y cuáles son los datos nutricionales. Investiga en internet diversos menús para hacerte la vida más fácil.

5. Coloca en un recipiente pequeño la cantidad suficiente de sal para tu familia y utiliza solo esa para cocinar. La mayoría de alimentos procesados tienen sal y debes consumir menos de 2,300 mg al día.

No seas demasiado estricto contigo, si tratas de cambiar tu dieta radicalmente, probablemente será más difícil ser constante. Distribuye la cantidad de sodio que comes en pequeñas cantidades al día.

La educación nutricional es clave para promover los buenos hábitos alimenticios y mejorar la calidad de vida de las personas, sin embargo, en la mayoría de casos no se cuenta con los conocimientos necesarios para tomar decisiones acertadas en materia nutricional. Consulte a su médico.

Leticia Román nació en Nueva York pero vive en México desde hace más de 10 años. Estudió danza en prestigiosas escuelas como: Laguardia High School of the Performing Arts. Se encarga de promover una alimentación sana y un entrenamiento inteligente que les permita gozar de bienestar físico y una vida feliz.